Se entiende que la identidad personal es una y está relacionada con quien realmente eres, con tu personalidad, tus intereses o tus valores. Mientras que la identidad social está más asociada al entorno que te rodea; los grupos sociales con los que nos relacionamos, la familia, las religiones y como estos influyen en ti.
La relación que existe entre la identidad personal y la identidad social es que, el segundo depende directamente del primero. Es decir, nuestra identidad personal y que tan seguro estemos de ellas; es la que va a determinar cómo nos comportemos en un entorno social.
¿Qué es la identidad personal y la identidad social y como cada una influye en la otra?
La identidad personal es una cuestión que te permite saber quién eres como individuo; es la perspectiva que tiene de ti como persona. Esta serie de identificaciones se van adquiriendo a lo largo de la vida. Con cada desafío, problema o situación que se viva y son capaces de moldear tu personalidad, tu conducta y por supuesto tu autoestima.
El desarrollo de la personalidad comienza desde que son unos niños, desde el momento que somos conscientes de nuestra presencia en el mundo y de la de otros. La identidad personal se desenvuelve primeramente en nuestros hogares, con la familia y de ella dependerá nuestra integración en el mundo social.
La identidad social es algo que te define en términos sociales. Cada persona tiene muchas identidades sociales, diferente para cada grupo a los que pertenezca. Por ejemplo, una persona puede llegar a definirse como hombre, hijo, padre, empresario, millonario, latino, moreno o bailarín; y esto va a depender del grupo con el que se encuentre.
Somos personas sociales que constantemente nos encontramos interactuando con otros y son esas interacciones las que forman redes y por ende grupos sociales. En muchos aspectos va a determinar cómo somos, pues en estos se vinculan valores y normas que tendemos a interiorizar.
La relación entre ambas identidades tiende a generar algunos problemas
1. La motivación
Nuestro comportamiento dependerá de la motivación y si esta esta proviene de la identidad personal entonces la forma en la que nos comportemos será de acuerdo a una personalidad propia, mientras que, si la motivación proviene de la conducta social, entonces la conducta será más relacionada a los valores que nos haya proporcionado dado grupo social.
2. La posición en un grupo social
Las posiciones en un grupo social no son exclusivas, por lo que tu puesto puede llegar a ser intercambiable. Lo que realmente importa es que exista un miembro que ocupe cada lugar.
3. Como nos identificamos con el grupo social
Esto va a depender de los cambios que existan dentro del grupo, por ejemplo: si formamos parte de un equipo deportivo y nuestro equipo gana un partido importante; la identidad social dentro del equipo va a ser mucho más fuerte y consistente.
Crecimiento personal
Cada identidad tiene limitaciones que lamentablemente no se llenaran si no se recurre a la otra identidad; esto es lo que permite que se fusionen ambas identidades y que cada una sea muy fuerte.
Igualmente, cuando cada identidad se encuentra relacionada con la otra, es más fácil para la persona la unión con cada uno de los grupos sociales, esto también permite que con el tiempo cada identidad sea mucho más perceptible por individual.
Para que una persona tenga un buen desarrollo dentro de la sociedad, siempre va a ser importante que tanto su identidad personal, como su identidad social se encuentre muy definidas y que cada una se apoye y complemente con la otra.
